Hacen falta mil años
y mil mas
para velar tu recuerdo
tan sentido
tan añorado
tan verdadero
cuanto te extrañamos
cuanto nos cuesta creerlo
Tu, que perdonaste lo imperdonable
sin matices ni esfuerzos
olvidando todo lo malo
y recordando solo lo bueno
con las puertas abiertas
de tu casa y de tus miedos
manantial de bondad buena
de la que no lo parece
y es puro cielo.
Te necesitamos
como antes y siempre
nos queda lo que sabemos
nada llena tu sitio
ese vacío que sabe a duelo
ese duelo que huele a eterno
que tantas veces atenaza
nuestro corazón huérfano
Tu sonrisa bonita
de tanto bien hecho
de tu vida sin par
de tu honra y de tu celo
para ser ejemplar
sin pretenderlo
Han pasado dos años y mil mas
y siempre te querremos
siempre serás nuestra
hasta el ultimo aliento.
Escrito por
Julius Marx
Soy de los no inteligentes que lo sabe, y trata de remediar este hándicap. Dura pelea, ¡¡palabra!!
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